En este tiempo en que ha tomado relevancia en la agenda mundial el cambio en el paradigma energético y la electromovilidad comienza a ser una realidad, la mirada del mundo y de los argentinos se ha volcado hacia el litio.

Nuestro país, poseedor de la segunda mayor reserva mundial de litio, presenta excelentes perspectivas de desarrollarse y tenemos las condiciones para ser el tercer productor del mundo en los próximos años, acortando la brecha con Australia y Chile.

Quienes conocen el funcionamiento de la producción  y el mercado del litio vienen trabajando para ampliar la base de proyectos en funcionamiento, para aprovechar la  ventana de oportunidad que se abre.

En este sentido, Alberto Carlocchia, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros, alerta sobre el hecho de que “son momentos en los que debemos concentrar  nuestros esfuerzos  para impulsar estrategias de apertura al mercado externo en búsqueda de que el país reciba las divisas que tanto necesita para poner en acto todo nuestro potencial de litio. Debemos evitar poner en riesgo esta posibilidad concreta dando señales confusas a los inversores acerca de estatizaciones.“

Para Carlocchia, “hay que entender que el momento actual es una ventana de oportunidad para los países que, como Argentina, poseen reservas de litio. Por eso, se deben impulsar normativas que favorezcan la inversión que tienda a la producción, la exportación, generación de divisas y lo más importante lograr la creación de trabajo digno y oportunidades para nuestra gente. Hablamos de `ventana de oportunidad` porque la demanda está atada a determinadas tecnologías, que hoy están en auge, pero podrían ser reemplazadas en las  décadas futuras”.

“Para transformar los recursos geológicos en recursos para el desarrollo del país, necesitamos seguir incentivando la llegada de inversiones que generen proyectos, para no quedarnos atrás frente a competidores de la inversión minera, aprovechando que hoy, a las cuestiones relacionadas con la demanda producida por las nuevas tecnologías, se suma la ventaja competitiva frente a la situación de otros países de la región”.

Con tan solo dos proyectos en operación, nuestro país ya es el 4º productor mundial. Ambos proyectos se encuentran además en fase de expansión y hay otro en construcción. A ellos se suman 13 proyectos en etapas avanzadas de factibilidad y más de 40 en exploración. Esto permitiría a Argentina multiplicar su producción por 10 para el año 2024, si entran en operación los proyectos en cartera. Esto transformaría al litio en un producto de peso en la balanza comercial del país. Desde  CAEM trabajamos para que así sea.