La Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) participó hoy de la reunión de la Mesa Nacional del Plan Estratégico para el Desarrollo Minero Argentino. Para llevar adelante un abanico de temas primordiales para la industria, los participantes se dividieron en cinco mesas específicas: Minería Integrada, Minería e Institucionalidad, Minería Inclusiva, Minería Ambientalmente Sostenible y Minería Competitiva.
Por la Cámara participaron su presidente, Alberto Carlocchia, y su Director Ejecutivo, Luciano Berenstein. Entre los temas que abarcados estuvieron: Creación de valor compartido desde etapas tempranas en base a diálogo y consenso; Ordenamiento de la gestión del recurso hídrico; Diagnóstico de competitividad de la Industria Minera Argentina; Estrategia nacional de desarrollo de proveedores locales que permita potenciar la integración y armonizar las políticas provinciales; Fortalecimiento de la instituciones públicas y privadas. Articulación y cooperación interministerial e interjurisdiccional.
La participación de la Cámara está orientada a colaborar para la generación de escenarios apropiados para la llegada de inversiones y el crecimiento de la industria.
La minería es una de las industrias con mejores perspectivas para colaborar en la recuperación del país en la post-pandemia, por ser generadora de divisas y por su efecto movilizador en las economías regionales. Por eso, se está trabajando para crear las condiciones para las inversiones necesarias, dado que ampliar la base de proyectos en producción permitirá incrementar las exportaciones argentinas y generar divisas.
Este plan de trabajo a largo plazo abarcaría no solo temas impositivos, sino también de competitividad y de acompañamiento a los proyectos. Lo interesante de la labor de la mesa es que ya no somos solo los mineros pensando en nuestro sector, sino que hay una pluralidad de actores sociales que aportan cada uno al desarrollo de una minería argentina. Por eso se han sumado representantes que aportan perspectivas desde lo académico, lo científico, lo social y hasta lo religioso.
Se trata de un trabajo multipartícipe, porque la consolidación de la minería en la matriz productiva nacional impulsa avances que trascienden lo sectorial. La minería es parte de un entramado productivo y social, que nuestro país necesita fortalecer.