Tras la derogación de la Ley 9.209, desde la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), como representantes de la industria, pero por sobre todas las cosas, como argentinos, lamentamos la oportunidad que pierde nuestro país en términos de empleo y de desarrollo productivo regional.
Confiamos en que lo acontecido en Mendoza represente un nuevo punto de partida, que propicie un proceso de dialogo superador mediante la generación de consensos productivos.
Creemos que la minería, la sociedad civil y el Estado pueden trabajar en conjunto en la búsqueda de una verdadera sustentabilidad, inclusiva y generadora de desarrollo sostenible para todos.
Lo sucedido marca el camino: el trabajo por delante en pos de consensos es arduo y transformador. Pero ya estamos avanzando en esa dirección. Los programas internacionales de transparencia y calidad como la Iniciativa para la Transparencia de la Industrias Extractivas (EITI) y Hacia una Minería Sustentable (HMS) ya están dando sus primeros pasos en el país, constituyendo un nuevo marco para la industria minera. A ellos, se suman todas las instancias de control ciudadano.
Desde CAEM reafirmamos nuestro compromiso con la gente y con la minería responsable, y nos encontramos a disposición para aportar nuestra experiencia, conocimiento e información científica sobre la industria que es madre de todas las industrias.