La Cámara Argentina de Empresarios Mineros participó de un panel conversatorio con los referentes de los principales medios del país, congregados por la 61º Asamblea de General Ordinaria de Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa).

En el marco del encuentro, organizado por Diario Huarpe, Alfredo Vitalller, vicepresidente 2º de CAEM y VP de Asuntos Corporativos de Josemaría, explicó la importancia estratégica del cobre en el escenario de las nuevas tecnologías energéticas, no solo en la generación, tal como en los molinos de viento, sino también en el transporte de la energía generada: Todos los cables, todo el transporte se hace con cobre, dónde se almacena, también con cobre. Los autos eléctricos también incrementarán la demanda, ya que utilizan entre 6 y 8 veces más cobre que un auto común.Y para todo esto, los países también van a necesitar incrementar su electrificación.

«Se estima que la curva de demanda dará una subida muy alta en el 2035, de la mano de los objetivos de descarbonización. Lo importante de esto es que Argentina no tiene que salir a generar un mercado, sino que lo que produzca se lo van a demandar porque se necesita”, consideró.  Y explicó que los proyectos de cobre necesitan de grandes inversiones, de alrededor de USD 5.000 millones, por lo que se deben generar condiciones de estabilidad fiscal y acceso al MULC, entre otras.

Luciano Berenstein, miembro de la Comisión Directiva de CAEM y country manager de Albemarle, destacó el dinamismo que la industria del litio viene teniendo en nuestro país. Y recordó la importancia de sostener un contexto de reglas claras para que Argentina se consolide a nivel mundial, con el litio pero también con otros minerales, como el cobre, fundamental en relación al cambio de la matriz energética basado en las electromovilidad y las energías limpias. “La ventana de oportunidad que se abre para nuestro país es hoy”, concluyó.

En tanto que, Marcelo Álvarez, director ejecutivo de Relaciones Gubernamentales para Barrick Sudamérica consideró compleja la situación del oro y plata en caso de que no se generen las condiciones para que se explore y se descubran nuevos yacimientos o se pueda extenderla vida útil de los yacimientos existentes. De no cambiarse esto, el ciclo de vida del oro en el país rondaría los 10 o 12 años. El panel estuvo moderado por Marcelo Agulles, de Minas Argentinas.