La Comisión Nacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (CONAETI) y la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) organizaron una jornada de capacitación online denominada “Trabajo infantil y adolescente, una mirada integral” que permitió analizar la complejidad de este fenómeno. Fue brindada por Martín De Nicola (Coordinador de Políticas de Erradicación del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente y por Diana Salvaggio, Teresa Stonski y Julieta Csikos (del equipo de CONAETI), con la moderación de Luciano Berenstein, Director Ejecutivo de CAEM.

El trabajo infantil es toda actividad económica o estrategia de supervivencia, remunerada o no, realizada por menores de 16 años. En tanto que el trabajo adolescente es el que se da entre los entre los 16 y los 17 años.

Martín De Nicola explicó como esta problemática viene agudizándose en el marco de la pandemia de COVID-19 y su impacto en la situación económica y de empleo en las familias.

Para Teresa Stonski, es necesario visibilizar el componente cultural. Por ejemplo, deberíamos desnaturalizar frases como “los chicos tienen que aprender el trabajo desde chiquitos” o  “está bien que los adolescentes trabajen en lo que encuentren, así tienen dinero para sus gastos”. Para la especialista,” si no somos capaces de ver que esto es trabajo infantil o adolescente y que puede ser perjudicial, nunca vamos a actuar para evitarlo”.

Julieta Csikos explicó la normativa vigente sobre el trabajo infantil y explicó que “cada empresa es responsable solidariamente en su cadena de valor, por eso es importante que las compañías hagan un análisis de la misma”. Detectar este tipo de situaciones permite abordarlas en conjunto.

Diana Salvaggio comentó el valor adicional que tiene para las empresas trabajar en acciones que favorezcan la erradicación del trabajo infantil, que incluye una mejora de la reputación corporativa en su relacionamiento con la sociedad. Y hacia adentro, genera mejoras en el clima laboral y el compromiso de los colaboradores.

“Hay una articulación necesaria del trabajo con las cadena de valor. Todas las empresas forman parte de una cadena de valor, por lo que deben identificar los eslabones más propensos al trabajo infantil” expresó la especialista y recomendó a las empresas que no trabajen solas estos temas, dado que tienen la posibilidad de hacerlo en conjunto, de estar acompañadas por otros actores del sector y de desarrollar proyectos en común.

Luciano Berenstein expresó el compromiso de la cámara y del sector con la prevención y erradicación de esta problemática, recordó que CAEM lleva varios años acompañando a la Red de Empresas contra el Trabajo Infantil e instó a que las empresas presentes adhieran a esta iniciativa.

La CONAETI coordina, evalúa y da seguimiento a los esfuerzos para prevenir y erradicar el trabajo infantil. Está integrada por representantes de los organismos dependientes del Poder Ejecutivo nacional, organizaciones de trabajadores, empleadores y de la sociedad civil y cuenta con el asesoramiento de las agencias internacionales de cooperación (OIT y UNICEF)